Anoche tomé tu foto en mis manos y me quedé mirándola fijamente....han pasado casi dos años desde tu partida y por primera vez en ese tiempo me permití hecharte de menos. Pienso que en nuestro afán por apartar el dolor de la partida nos limitamos al mismo tiempo de sentir. Y sentir para mi es parte de vivir... Recordé la última vez que me quedé mirándote fijamente antes de que estuvieras en lo que fue tu lecho de muerte. Estabas ya muy enfermo y de haber sabido que te quedaba tan poco tiempo entre nosotros te hubiese abrazado fuerte. Se lo que vas a decirme...que te abrazé y te besé hasta el cansancio durante tu última estadía en el hospital. Que te besé y te abrazé en aquella fria morgue cuando tu alma había dejado ya ese cascarón que llamamos cuerpo. Si...fueron muchos besos y abrazos durante tantos años y siento...siento que aquella vez aunque te besé no te dí un abrazo. Era Lunes y había dejado la sopa que tu con tanto esmero mandaste a preparar para mi...sabías exactame...
Una recopilacion de Reflexiones y Escritos que tratan de definir quien soy, de donde vengo y a donde voy...