Que mejor manera de finalizar un año y dar inicio a otro que con una enseñanza...y es que ustedes saben que soy una verdadera fanática del aprendizaje por terceros. Si, me confieso culpable pues soy de aquellas personas que SI aprenden por experiencia ajena...por qué debo caerme en el hoyo donde ya se cayó alguien que se tomó la molestia de escribir su aprendizaje?.
Pues bien...todo comienza en Ashland, Oregon (si señor...un sitio en Estados Unidos para que usted vea que yo hasta de fuera importo aprendizaje). En este tranquilo pueblo pasó algo rarísimo esta navidad, los amigos de Chet Fitch se sorprendieron al recibir tarjetas de navidad de Chet este año... por qué se sorprendieron? la respuestas es sencilla nuestro querido amigo Chet había muerto en Octubre pasado.
Chet era muy conocido entre sus amigos por su sentido del humor, un viejo afable que murió a la edad de 88 años al parecer sufría de algún tipo de enfermedad terminal y se dedicó a planificar la última broma que le jugaría a sus amigos antes de morir.
Hagamos un alto en la historia para aclarar que el distinguido caballero ni estaba loco ni sufria de delirio mental. Creo que su actitud ante la vida que estaba por dejar y la nueva vida que le esperaba es la que me gustaria tener al enfrentarme yo al ocaso mismo de mi existencia.
Pero bueno...sigamos con la historia. Chet inició sus compras de tarjetas de navidad para todos sus amigos y a dichas tarjetas le escribió el siguiente mensaje...
"Le pedí al Gran Jefe (Big Guy) si podría volver por un momento a la tierra y enviar algunas tarjetas, en un principio me dijo que no pero al continuar yo con mi insistencia al final accedió. Me gustaría decirles como son las cosas por aquí, sin embargo no hay palabras que puedan describirlo. Probablemente los estaré viendo pronto, a algunos antes de lo que ustedes creen. Deseándoles una Feliz Navidad Chet Fitch"
Su barbera y amiga la Sra. Patty Dean ayudó a Chet a llevar a cabo su plan. Cuando Chet finalizó las tarjetas las entregó a Patty y le solicitó que las enviara luego de su muerte. Mantuvo la lista de direcciones actualizadas y le dió dinero a su amiga para los sellos postales.
Hace unos meses atrás, Fitch le dijo que probablemente este año ella podría enviar las tarjetas...murió una semana después de haberle dicho esto.
Debo agregar que Chet debe estar muerto (bueno eso es evidente) de la risa en el cielo...debe haberle hecho muchisima gracia las caras de sus amigos y amigas al recibir las tarjetas que tenian como dirección del destinatario "el cielo".
La enseñanza más poderosa que tiene esta historia es la actitud de Chet ante su partida de este mundo terrenal. Chet probablemente estaba asustado o un poco preocupado ante lo desconocido...y quién no lo estaría? sin embargo decidió encarar su partida como había encarado su vida misma...con un sentido del humor y un optimismo digno de seres humanos extraordinarios.
Si nos vamos un paso más allá podemos también admirar el increible autoconocimiento que Chet tenía de su esencia misma. Chet comprendía que somos seres espirituales, que nuestra verdadera vida inicia cuando partimos de este mundo físico y nos convertimos en seres espirituales, por eso no le preocupaba marcharse y ante la noticia de que estaba por dejarnos, simplemente hizo sus maletas y se marchó...no sin antes tomarse un momento para hacer una última travesura humana...
Tengo que admitir que hasta hace unos años atrás me preocupaba enormemente la muerte y la veía más como un castigo que como cualquier otra cosa. Sin embargo, cuando mi despertar espiritual llegó y me di cuenta que lejos de ser un cuerpo físico con una cierta cantidad de años era un cuerpo espiritual poseedor de vida eterna, comenzé a ver mi vida y mi mundo de otra manera, comenzé a comprender que mi verdadero propósito de vivir no radicaba en cosas materiales pues ellas no trascienden sino que radicaba en obras que tuviesen un valor espiritual.
Esto hizo cambiar mi percepción del dinero, mi percepción sobre las relaciones, mi percepción sobre lo verdaderamente importante...
Al terminar este año quiero cerrar con un agradecimiento a Chet...allá en el cielo probablemente puede leer mi blog...nunca lo conocí pero estoy segura que lo haré cuando mi momento llegue. Al despedir el 2007 y dar la bienvenida al 2008 quiero recordar cual es mi verdadero yo...un yo espiritual con vida eterna.
A todos les deseo un feliz nuevo año 2008, lleno de salud y amor...que cada uno de esos 365 dias que estan por venir los vivan recordando quienes son en realidad, que cada dia de esos este plagado de pequeñas obras que puedan llevarse con ustedes como las grandes satisfacciones que su paso por esta vida temporal les dejó.
Seamos menos materiales y más espirituales...recordemos que la casa, el carro, el trabajo...todo eso se queda aqui y que nuestro equipaje serán nuestras obras. Piensa desde ahora que te gustaria llevarte como equipaje y comienza a trabajar por ello, al hacer esto te conviertes en un instrumento de Dios, en un canal de milagros, tu corazón se llenará de una carga preciosa y tendrás un 2008 maravilloso.
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